Un clásico de la cocina casera que más recuerdos nos trae a los veteranos de algunas guerras, es la carne al horno. Cuando sale con papas, cebollas, morrones y batatas, trae los aromas de las mejores vidas.
En Buenos Aires hay un rey indiscutido de la carne al horno: Batata. La cocina de Batatas está en floresta, exactamente en Gaona 4444. Más fácil de recordar, imposible.
Con pinta de parrilla al paso, lo de Batata es el típico boliche que oculta un secreto que solo conocen los iniciados. Es la clave para entender que pasa con esos bodegones por los que nadie da un peso, pero que sin embargo se llenan siempre. A esos lugares se llegan solamente porque alguien nos ha develado el secreto que esconden. A nosotros fue nuestro amigo Marcelo Barrio, el arquitecto de laberintos, el que nos abrió las puertas del cielo. Y allá fuimos, y la cocina de Batatas con su carne al horno sublime, jugosa, sabrosa, tierna, abundante, fue coronado como el bodegón del año 2010.
A ese manjar tan especial agreguen la destreza y gentileza de un mozo hincha de independiente, una colección de carteles de y fotos de artistas y deportistas populares en todas su paredes, una muy buena picada para la espera y unos postres bien servidos.
La cocina de Batatas, allá en Gaona 4444 tiene una carne al horno que parece recién salida de nuestros mejores sueños infantiles. Como un arcano que se trasmite de boca en boca, nosotros ahora lo revelamos para ustedes. Vayan con tiempo o reserven antes pues, aunque no son tantos los que conocen el secreto, son suficientes para llenar las mesas todas las noches del año.
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